Ángel Dámaso Luis León

El insularismo como fenómeno histórico y el caso majorero como punto de inflexión sobre su reconfiguración.

RESUMEN:

Tradicionalmente, la visión que se ha ofrecido sobre la problemática de la conflictividad insular, en los medios de comunicación, ha primado la vertiente centralista. Es decir, la cuestión del conflicto de territorial que vertebra gran parte de la construcción de Canarias se ha orientado al binomio Gran Canaria-Tenerife. El énfasis en dicha situación ha trasvasado incluso el mundo de la comunicación llegando a influir también en el seno de la academia. La realidad es que la situación de Canarias, en cuanto a su construcción histórico-territorial, se ha mostrado mucho más compleja y diversa y es ahí donde entra la siguiente investigación. La nueva oleada de los estudios sobre realidades insulares ha propiciado la ampliación del foco más allá de los aspectos de la centralidad en Canarias, enriqueciendo así un discurso que quedaba algo incompleto. Y dentro de esa nueva oleada, son los estudios sobre la experiencia temprana de Asamblea Majorera, los que han generado un cierto punto de inflexión en el seno del archipiélago. Esta comunicación lo que busca es abordar ese proceso de reconfiguración del insularismo político y de lo insular, entendido desde la historia reciente, pero que hunde sus raíces en un contexto más profundo dentro de la edad contemporánea. El punto central es abordar como Fuerteventura y las diferentes experiencias histórico-políticas majoreras han obligado a las ciencias sociales a revisar conceptos que no abordaban toda la realidad del archipiélago en su complejidad. Además de ello, también mostrar como dichas experiencias de la isla majorera han supuesto un acicate que permite y está permitiendo el abordaje de las diferentes realidades políticas insulares periféricas desde un punto de vista protagonista, y no solo desde la subalternidad a la que, tradicionalmente, se les había relegado.